Por la izquierda o por la derecha,
no hay camino de vuelta,
estamos en la cuerda floja,
en el limbo de una caída tras otra,
mirando la incertidumbre sin que nadie la recoja,
mirando las amistades que desaparecerán cual paradoja.
No tenemos casa, no tenemos pilares, no hay cemento ni cristales,
después de aquella boda, ya solo queda saltar en la cuerda floja,
y nadie nos pueda asegurar,
que no será la misma que usemos para armar nuestra horca.
¿Por qué todo siempre se vuelve en nuestra contra?
No hay camino de vuelta,
ahora solo queda la incertidumbre de un corazón roto,
la desdicha en nuestros ojos,
la rabia porque todo nuestro esfuerzo se haya vuelto polvo,
ahora solo queda comenzar de cero,
romper la banda y entablar un solo.
Estoy seguro que en el largo camino,
nos volveremos a encontrar,
mas maduros, mas formales e inoportunos,
mas seguros de lo que deparara el futuro.
El futuro lejano de un mundo que rechazo,
por el momento solo queda un adiós,
un beso en la mejilla, una mirada coqueta,
un apretón de manos, una broma ofensiva,
nos queda un ultimo abrazo,
solo uno y no mas,
tengo que irme,
hay una cuerda floja que debo cruzar.
Deséenme suerte,
porque no estoy seguro que lo vaya a lograr.